Arsenal de Sarandí y la Liga de Quito, campeones de la Copa Sudamericana en 2007 y 2009, son los únicos en capacidad de repetir título en la décima edición, a cuya fase de cuartos de final llegaron dos formaciones argentinas y solitarios representantes de Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Paraguay y Perú.
Arsenal, que dejó en la cuneta al Olimpia paraguayo, se medirá ahora con Universidad de Chile, que llega con la fama de haber tumbado nada menos que al Flamengo, una entidad que se enorgullece de arrastrar a 45 millones de hinchas.
Liga de Quito, la institución que también conquistó la Copa Libertadores en 2008 y la Recopa Sudamericana en 2009 y 2010, llega con el antecedente de haber eliminado al Independiente, el campeón de la Copa Sudamericana del año pasado, y en la próxima instancia se medirá con el Libertad paraguayo, verdugo del Sao Paulo.
BRASIL PERDIO TRES REPRESENTANTES
La fase de octavos de final dejó para el anecdotario del torneo un capítulo oscuro para el fútbol brasileño.
Tres de sus equipos salieron por la puerta de atrás con un bulto de goles como castigo.
El Flamengo fue eliminado por Universidad de Chile tras encajar cinco goles y pasar sus cañoneros por Río de Janeiro y Santiago con la pólvora mojada (0-4 y 1-0).
El Botafogo también sufrió cinco goles en su mano a mano con el Independiente Santa Fe colombiano (1-1 y 4-1).
Y el Sao Paulo, que estrenaba a Emerson Leao en el banquillo, sucumbió por 2-0 en su visita al Libertad una semana después de haber ganado en casa por la mínima.
El Flamengo tiró la toalla antes del partido de vuelta. Viajó a Santiago con solo quince jugadores y de ellos dos titulares habituales pero ni siquiera los más emblemáticos.
El panorama pintaba igual al de la 'pesadilla sin fin', que fue la humillación sufrida ante sus propios hinchas en Río de Janeiro al golear sin piedad la Universidad de Chile por 0-4.
A Brasil solo le queda el Vasco Da Gama ex club de Histórico goleador Brasileño Romario.
